Sentada al umbral del silencio
abre los ojos al cielo de una mano.
Resonaba frente al mundo,
a la protección de lo inaudito.
Amanecer, a cada abismo, mientras
se le abren las venas que respiran.
Jugar, con las ventanas,
para hacerlas puerta paralela
mientras persigue las sombras
de la luna.
2 comentarios:
ausencia
esa palabra que raspa el alma,
humedece los ojos
y regresa en el recuerdo
:-)
yo.
Publicar un comentario